Hoy en día, las organizaciones se encuentran en un entorno de transformación constante, tanto en el uso de la tecnología, en el cambio de mindset de los colaboradores, así como en los modelos de gestión y estrategias; sin embargo, un factor que no ha cambiado y que sigue siendo vigente, pero, sobre todo necesario, es […]
Hoy en día, las organizaciones se encuentran en un entorno de transformación constante, tanto en el uso de la tecnología, en el cambio de mindset de los colaboradores, así como en los modelos de gestión y estrategias; sin embargo, un factor que no ha cambiado y que sigue siendo vigente, pero, sobre todo necesario, es contar con líderes propositivos, con visión, iniciativa, empatía y que contribuyan al logro de objetivos de los equipos de trabajo.
Un líder debe poseer diversas y específicas características para guiar a su equipo y alcanzar los objetivos del puesto que hoy ocupa, pero ¿dicho líder logrará ser exitoso en un puesto con mayores retos y responsabilidades? En la actualidad, existen muchas herramientas de gestión que te permiten dar respuesta a la pregunta anterior o bien, nos permiten identificar cuál es el potencial futuro que tienen los colaboradores para ser líderes, sin dejar de considerar su desempeño, de tal forma que puedas obtener un panorama del posible “camino” del colaborador e identificar si puede ser una promesa de éxito para ocupar un puesto clave o se descarte de ello.
Herramientas como ”9-box grid” o la matriz de Mckinsey, como su nombre refiere, es una herramienta formada por 9 cuadrantes, en los que se mapea y ubica a los colaboradores con el objetivo de identificar el talento y el desempeño con el que cuentan. Antes de implementar dicha herramienta es muy importante considerar el enfoque que deberá tener, es decir, los gestores de talento deberán orientarlo a la identificación del «perfil potencial» de los colaboradores para acceder a un puesto clave, esto quiere decir que el colaborador deberá ser comparado con el puesto superior o siguiente a ocupar, no con el puesto actual.
Cada uno de los cuadrantes posee características propias, sin embargo, se pueden agrupar en los siguientes segmentos:
Definitivamente cada cuadrante cuenta con brechas de desarrollo, y pueden ser fácilmente identificados con ayuda de esta herramienta, sin embargo, es importante capacitar y desarrollar las habilidades de los líderes, así como motivarlos para elevar su desempeño para que sean colaboradores que aporten valor a la organización.
